La huella de carbono de los edificios
Uno de los principales desafíos en la construcción es reducir la huella de carbono.
Los vehículos contribuyen al calentamiento global, pero no solo ellos. Los inmuebles también representan el 26% del consumo de energía en Cataluña y el 10,6% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Para los edificios existe el certificado energético, y gracias a él se pueden clasificar según su eficiencia energética, de mayor a menor de la A a la G.
El problema principal son los edificios ya construidos, en los que es importante invertir para instalar energías renovables y así poder alcanzar los objetivos de reducción de emisiones de CO2 para el 2030.
Para que los edificios sean lo más eficientes energéticamente hablando, se puede conseguir trabajando con fuentes renovables, y mejorando el aislamiento de las fachadas, ventanas y cubiertas, que representan el principal gasto energético.
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